El acto cotidiano de desnudarse, de quitarse la ropa parcial o totalmente; el hecho de mostrar al mundo como somos físicamente; nuestro color de piel, nuestras imperfecciones; lunares, berrugas, pecas, cicatrices curadas con el tiempo, heridas de mil y una batallas; y tambien nuestras particulares perfecciones; nuestra musculatura de la que estamos orgullosos, nuestras curvas, aquel tatuaje que nos hicimos aquella noche de borrachera y al que con el tiempo le hemos cogido cariño a pesar de no ser precisamente una obra maestra. El acto de mirarse a un espejo y verse reflejado en él: Conocerse; lo que nos gusta a nosotros de nosotros mismos y lo que nos gustaría que fuese un poco diferente o poder retocarlo, lo que pensamos que a los demas les gusta de nosotros y lo que gusta menos...Frente a este acto cotidiano, diario, banal, existe otro mucho mas delicado y profundo, mucho mas peligroso, que consiste en mostrar al mundo quién somos y por qué somos así; desnudarse por dentro: Desnudar el alma.
Porque ¿Podrá haber un acto mas bonito que llevar tu yo al aire y mostrarlo sin tapujos y sin misterios? Que todos sepan como somos o como creemos ser (porque tampoco tenemos total seguridad de ello) por dentro sin censuras, y que hemos hecho para conseguir ese estado.Hablar, contar las cosas, contar lo divino y lo humano, permite que elalma se relaje y se desnude poco a poco. Pero ¿Puede haber a la vez algo mas terrible que desnudar el alma? Porque hay almas blancas con mayoría de actos que la hacen resplandecer y de las que sus dueños se sienten orgullosos. Pero hay almas negras como la pez de personas cuyos hechos reprochables han terminado por ensuciarla y permanecen escondidas esperando a que lleguen otros momentos mas favorables para salir y exhibir toda su rudeza y crueldad.
Pero ¿Cuantas almas blancas y negras andan por ahí desnudas haciendo piruetas, mostrando como son en su totalidad? Ufff con cuatro o cinco creo que me paso. La gran inmensidad de las almas permanecen ahí, escondidas, dando alguna de cal y otra de arena y advirtiendo de su presencia pero sin atreverse a salir y exponerse a la luz: Ya sea por miedo; ya sea por timidez o por no creer que sea necesaria su.presencia en ese momeno ¡ Qué difícil es atreverse a desnudarse por dentro ! Y que los demas conozcan tus secretos mas íntimos, tus pensamientos mas escondidos y tus actos mas ocultos; pero ¡¡Que alivio para el alma y para el hombre!!
Que buenas reflexiones
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