Drogas cotidianas (I) La cafeína

La droga psicoactiva llamada cafeína ha tenido un gran impacto en nuestra cultura desde el momento de su transformación en bebida social en los salones en el siglo XVIII.

La cafeína es un compuesto químico que de forma natural es sintetizado por algunas plantas como medio de defensa contra insectos y parásitos. Es acumulado por las plantas en las hojas, semillas y frutos. En el ser humano es un estimulante del sistema nervioso central. Es hidrosoluble por lo que en condiciones normales se elimina totalmente por la orina.

La cafeína no crea adicción pero si costumbre, pero su consumo excesivo puede llevar a que se presenten frecuencia cardíaca rápida, micción excesiva, náuseas, vómitos, inquietud, ansiedad, depresión, temblores y dificultad para dormir.
  

Los pueblos antiguos descubrieron que masticar la corteza y hojas de ciertas plantas tenía el efecto de aliviar la fatiga, estimular el estado de alerta y elevar el ánimo. Sólo mucho después se descubrió que el efecto de la cafeína se incrementaba al remojar tales plantas en agua caliente.

La historia del café ha sido registrada desde el siglo IX. Durante ese período, los granos de café sólo estaban disponibles en su hábitat natural, Etiopía. Una leyenda popular atribuye su descubrimiento a un criador de cabras llamado Kaldi, el cual habría observado que las cabras se volvían eufóricas y perdían el sueño por las noches después de haber pastado junto a los arbustos de café  (No, no viene de ahí el café con leche).El pastor probó los frutos que las cabras habían estado comiendo, y experimentó la misma vitalidad. 

Cerca del final del sigo XVI, el uso del café fue registrado por un europeo residente en Egipto, y alrededor de este periodo se introduce su uso general en el Oriente próximo. La apreciación del café como una bebida en Europa, donde fue conocido inicialmente como "vino árabe", data del siglo XVII. Durante este período se establecieron "casas de café", abriéndose las primeras en Constantinopla y Venecia. Pronto se volvieron populares en toda Europa Oriental, y jugó un papel significativo en las relaciones sociales durante los siglos XVII y XVIII.

Otra de las fuentes mas conocidas de cafeína, la nuez de cola, también tiene orígen antiguo. Es masticada en varias culturas africanas occidentales, de forma individual o en formación social, para restaurar la vitalidad y aplacar la sensación de hambre. Sin embargo socialmente no fue tan bien vista como el café pues el 13 de marzo de 1911, el gobierno americano quiso forzar a Coca-Cola a que eliminara la cafeína de su fórmula alegando argumentos, como que el uso excesivo del refresco en un colegio de señoritas condujo a "desenfrenos nocturnos, violaciones de las reglas de la escuela y los modales femeninos, e incluso inmoralidades". Aunque no lo consiguió, sí logró que se agregase la cafeína a la lista de sustancias "creadoras de hábito" y "dañinas" que deben listarse en la etiqueta de los productos.