jueves, 18 de septiembre de 2014

La coma criminal. La coma, criminal

El ejemplo del título es perfecto para explicar la perversidad de la coma criminal.

La coma es un signo de puntuación de múltiples usos en castellano, pero existe una creencia popular de que sirve para llenar espacios o para representar el paso de la saliva por la garganta; incluso muchos están convencidos de que se pone coma cuando el aire no alcanza para pronunciar una oración, como si un signo de puntuación sirviera para representar el habla… Nada más lejano de la realidad.

Tampoco es cierto lo que muchas de nuestros profesores nos dijeron cuando niños que la coma es una pausa. No, la coma no es una pausa, es un signo versátil, espléndido cuando se lo conoce a profundidad y de su buen uso depende que un texto se entienda.

Hay unas comas buenas, otras son malas y también hay comas criminales, aquellas innecesarias, porque rompen la cadencia de la oración y atentan contra la comprensión del mensaje. Estas últimas se ven a diario en carteles, revistas, diarios, Internet, etc. Otro gran grupo de malvadas muere a diario —a manos de correctores y editores— en la prensa, editoriales, escuelas, universidades, etc.


Gracias a http://elprofepedro.blogspot.com.es